Testimonio de Brenda González
Brenda, a sus 33 años, experimento un parto en agua en posición sentada.
Esto es lo que nos comparte, con respecto a su experiencia, sobre la atención con la Dra. Laritza Hernández.
Experiencia de control prenatal:
“Muy bien, siempre atendida. Recibí información de cada etapa del embarazo con respeto y delicadeza. En la ocasión que no pude ser atendida por la Dra. Laritza Hernández, fui recibida por el Dr. José Octavio Zavala (por una cirugía).”
Experiencia sobre trabajo de parto:
A pesar de que Luciana es mi tercer bebé, no sabía cómo sería comenzar el trabajo de parto de manera natural, tenía dudas acerca de todo, especialmente si mi cuerpo iba a poder hacer todo sin medicamentos ni intervenciones.
Al ir al hospital para la revisión, todavía dudaba si ya era la hora, porque aunque las contracciones estaban un poco más fuertes, llevaba así mucho tiempo y no avanzaba nada. Por eso me sorprendió cuando en la revisión resulto que ya tenía 5cm de dilatación.
La labor de parto fue muy bella, recorrí la habitación para calmar las contracciones, mi esposo y yo nos tomábamos fotos, reíamos, nos besábamos de repente, pude comer fruta e hidratarme, y aunque estábamos concentrados en la llegada de nuestra bebe, todo se dio de una manera muy íntima.
Doctora y enfermera siempre acompañándonos, de una manera muy respetuosa y humana, hablando de la etapa del parto en que nos encontrábamos y dando tiempo a ese proceso sin presiones.”
Su experiencia sobre el nacimiento de su hijo:
El recuerdo más especial del nacimiento de mi hija, es haber podido sacarla del agua yo misma, ser la primera persona en tocarla, tenerla en mi pecho y abrazarla es la recompensa por las experiencias anteriores, en donde las cosas no salieron como hubiera querido.
Después de una cesárea y un parto medicalizado, esto me confirmo que si puedo, que mi cuerpo sabe parir, que no hay nada malo en mí. También me hizo ver que si hay médicos apasionados y comprometidos con la vida, respetuosos y humanos, que hacen todo lo que está en sus manos para regalarnos estas experiencias.”
Mi hija tuvo el recibimiento que soñé: agua calientita, luz tenue, con música, al lado de gente que respeto sus tiempos y que la esperaba con los brazos abiertos y mucho amor. Con tranquilidad, siempre al lado de mamá y papá, nada de cuneros ni gente extraña, ni biberones.
Esta ha sido la experiencia más intensa y enriquecedora en mi vida. El pasar por un proceso de parto y descubrir que es algo maravilloso y muy bonito, es sorprendente. Es romper la idea de que es horrible y un mal necesario para traer un bebe al mundo.”
Puedes consultar a Brenda para más detalles:
brendagonzalezq@gmail.com
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